sábado, 13 de noviembre de 2010

Ciberludopatía

Hoy a la mañana me levanté para ir al centro de mi ciudad y averiguar y pagar el mes de natación (que tanto me apasiona como deporte) y empezar con el gimnasio, pero por el calor me dio paja y no fui.
Mejor aún, extendimos la línea telefónica y llevé la compu del comedor a mi pieza.
Bueno, lo peor de todo es que tuve que ayudar a mi viejo a poner unos cables y chan! yendo de un lado para el otro con el Sol pegándome en la cabeza. En cualquier momento pasaban algunas de las siguientes cosas:
· Me asaba. Es decir, me chamuscaba bajo el Sol y estaba listo para ponerme un poco de sal y comerme (no tengo problema si alguna lo quiere hacer) :p
· Me quemaba vivo, por lo que las ampollas iban a explotar con el calor y me proclamarían el bol*** más horripilante de la calle y cada vez que alguien me viera, mejor que se suicide porque sería mejor que contemplarme.
· Me insitaba a tirarme con cables y todo a la pileta, por lo que el final de este blog ya sabrían por qué es. :p Digamos que pikachu me daría un abrazo fuerte, muy muy fuerte.
· Me ahorcara con el cable para morir de una forma más digna (!) que las que ser comido, quemado vivo o electrucutado.

Ahora bien, pasado el tema, me dedicaré a hablar acerca de la foto.
Algunos saben que el Counter Strike no es de mi predilección, sino que prefiero otros juegos de la misma marca, como el Half Life (como habrán visto en un posteo hace mucho), entre otros. Así que veremos algunas cosas que nos caracterizan a los videogamers aficionados...

· Enflaquecés; el porqué: dejás de lado la hora de alimentarse por tu obsesión al juego. Digamos que si sos gordito y querés adelgazar, esta dieta del jugador es una excelente propuesta. Más adelante me ocuparé del tema de las dietas que tanto anda girando a mi alrededor, y más por el veranito...
· Te hacés un insociable de m***da: dejás de lado tus amistades y la gente que conocías. Parás de ir a los boliches para encerrarte en tu casa o en algún local de juegos en red que ya anda pasando de moda... Esto te trae sus complicaciones: no hacés deporte, te va mal en la escuela porque parás de ser el único amigo del nerd del curso (!), tenés posibilidades de tener que recurrir a sueños nocturnos chanchos involuntariamente u otras cosas peores porque parás de hablar con tu novia/"amigovia" (!) y cortás. Enseguida perdés todo contacto con mujer alguna y chan!, chau amor.
· Lo mejor de todo para tus padres y la gente aburrida que supera los 40; si sos de aquellos que decimos "No a las drogas, porque para qué matarse", esto está bueno: tu obsesión para pasar de nivel hará que dejes de lado también las drogas lícitas e ilícitas. Es decir: chau birra, chau faso, chau pastillas, chau adicciones.
· Bienvenida la fealdad: jugar compulsivamente hará que dejes de dormir y seas como yo que me levanto a las 5am para jugar y más ahora que tengo la compu en la pieza. :p
Veamos... Te saldrán ojeras, tu cansancio se notará desde la Luna, que seas un flaco escuálido no tiene onda, no te afeitarás ni te cortarás el pelo porque serás un hombre lobo informatizado, el olor a chivo hará que te conviertas en miel para las moscas y las ratas.
· Tu pieza se convertirá en el claustro medieval de tu barrio y los policías la usarán como reformatorio para los pendejos que tiran cohetes frente a tu casa, cosa que no te conviene.

Y un montón de cosas más. La última cosa que escribí ya es personal así que no creo que tengas la suerte como yo de que entren pendejos, sino que van a entrar convictos en libertad condicional cuando tu habitación sea considerada como cárcel y les satisfacerás su apetito carnal. ¡Uy! ¡Qué difícil que es conjugar el verbo "satisfacer"!

Por todo esto, no te deseo que seas un jugador compulsivo.




Publicado previo al 2007 - Puede no atribuirse al pensamiento actual.

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